Preparación interpretativa basada en el análisis de personajes, de sus circunstancias y conflictos. Así, se aprenderá a identificar cómo conseguir los objetivos de los personajes a interpretar.

Desarrollo de herramientas de improvisación que ayudan al alumno a entrenar su imaginario y agilidad mental a la hora de resolver problemas sobre un escenario.

Lectura de textos, investigación de contexto histórico. Comprensión de los objetivos del personaje, conflictos y acciones.

Profundización en el control de la consciencia corporal. Uso de diversas técnicas para poner el cuerpo al servicio del personaje. Presencia escénica, acción y conflicto.

Liberación y apertura de la voz para el fortalecimiento y desarrollo de los espacios de resonancia, la flexibilidad y potenciación de la respiración. Conocimiento de las bases para la articulación fluida y precisa. Desarrollo de la voz personal y potente y la capacidad de expresar matices del pensamiento y de las emociones.

 Unión de interpretación, escenografía, vestuario, espacio sonoro y lumínico – preparación de la obra para final de curso.