Si estás descubriendo que tu peque es tímido o ya llevas tiempo tratando de manejar esta situación, aquí te dejamos cinco estrategias que te ayudarán a que adquiera mayor confianza. La seguridad en uno mismo es la clave para permitirles ser menos tímidos, y que, por lo tanto, tengan mayor participación en las actividades sociales que le rodean.
1) Presta atención a lo que dice
Si tu peque quiere expresarse, déjalo que lo haga a sus anchas, pero lo más importante, préstale atención. Si es una persona tímida e intuye que las pocas veces que siente necesidad de expresar algo no es tomado en cuenta, entonces evitará comunicarse en el futuro.
No solo hay que oírlo mientras se expresa, también hay que participar en su conversación, validar sus puntos de vista, explicarle las cosas que no logre entender y darle tu opinión acerca de lo que dice. Para un niño tímido, sentirse escuchado es importante, pues lo invita a interactuar más a menudo.
2) Elógialo
Si quieres ayudarlo a que sea menos tímido, evita a toda costa las críticas y las comparaciones. Esto hará mella en su autoestima, se sentirá menospreciado y poco comprendido, lo que conlleva a que ni siquiera intente interactuar, pues pensará que no vale la pena.
Haz todo lo contrario, celebra cada vez que el peque sienta que ha conquistado algo. Si nota que sus logros son importantes para ti, querrá compartirlos con más frecuencia, lo que abrirá una ventana a sus emociones. Una sana expresión de los sentimientos permitirá que se convierta en alguien más abierto y capaz de procesar de manera adecuada su forma de pensar y de cómo percibe el mundo exterior.
3) Conviértete en el ejemplo
Aunque no sepas cuál es el origen de la timidez de tu peque, conviértete en un modelo a seguir. Haz que él vea en ti una persona segura, confiada y extrovertida. Para los peques sus padres son su héroes y siempre querrán imitarlos. Por lo tanto, si quieres ayudarlo a superar su timidez, actúa como te gustaría que él se comportase con otras personas. Además, si detecta seguridad en tus acciones, y los resultados positivos que obtienes debido a ella, querrá imitar esa actitud.
4) Prepáralo para las situaciones difíciles
Si ya sabes que se pondrá tenso ante ciertas situaciones sociales, explícale por anticipado lo que está a punto de enfrentar. Para un peque introvertido no hay nada peor que los escenarios sociales imprevistos. Les genera ansiedad y hacen que se retraigan más a su mundo interior. Pero si le explicas de antemano lo que está a punto de pasar, los niveles de ansiedad serán mucho más bajos y podrá socializar de la mejor manera posible.
5) Juego de roles
Invítalo a cambiar roles contigo en una circunstancia determinada. Es un juego muy divertido que lo hará utilizar su imaginación. Si la situación ficticia es una donde tenga que socializar, mucho mejor, pues así él ideará maneras de participar sin la presión de tener que vivirla en el presente.
Las clases de teatro son un ejemplo perfecto de los juegos de roles. Mientras aprenden a interpretar a un personaje que sean diferentes a ellos, descubrirán la seguridad que poseen en su interior.
Siempre estimula la socialización en tu peque. Estate pendiente ante posibles signos de depresión y ayúdalo a cultivar su autoestima. Lo más importante que deben aprender ambos, es que, a pesar de la timidez, tu peque es valioso y tiene mucho potencial que brindarle al mundo.