Hablar en público, hay a quien se le da y a quien no, incluso, hay quien parece disfrutarlo, pero ¿cómo lo logran?, ¿será esto un don nato? Pues bien, esto no siempre es así. Transmitir correctamente un mensaje a un público no es cuestión de talento sino de técnica, y una correcta técnica de comunicación no solo implica un excelente manejo del lenguaje tal como la escritura y la oratoria, también requiere un dominio sobre una herramienta de la dialéctica poco conocida: el lenguaje no verbal.
El lenguaje no verbal es aquello que nuestro cuerpo expresa más allá de las palabras: gestos, expresiones faciales, postura, etc… El correcto uso del lenguaje no verbal es un hábito adquirido que puede ser mejorado con la práctica, pero más importante aún, con la técnica. Es por esto que te presentamos 3 gestos que debes evitar al hablar en público.
No controlar tus brazos
Éste es uno de los puntos más importantes y de los menos atendidos. Mover los brazos sin sentido denota nerviosismo y falta de seguridad. Cruzar los brazos mientras se habla en público se percibe como algo negativo. Tu cuerpo está diciendo que no se siente cómodo con esa situación, deberás por tanto, evitar este tipo de gestos. Lo mejor será mantener una postura erguida pero relajada: espalda recta, brazos sostenidos a la altura del pecho y palmas siempre abiertas.
Mirar al suelo
Un error muy común es no mantener contacto visual con tu audiencia. Tu cuerpo buscara aliviar el estrés de una situación incómoda —como hablar en público—, no intercambiando información visual con el exterior, esto lo logra manteniendo la mirada en un punto fijo e inerte: el suelo. Este gesto da la sensación de inseguridad y derrota. Para contrarrestar esto, te aconsejamos visualizar a tu público como un todo: no es necesario mirar a cada uno de los asistentes, bastará con hacer un recorrido visual por toda la audiencia constantemente. Esto transmitirá a tu público información no verbal positiva: tu dominio sobre el tema y sobre todo tu estado de ánimo, además aliviara el estrés que sientes al exponerte a múltiples miradas reduciéndolas a una sola: tu audiencia.
Incongruencia entre lenguajes
Otro error común: hablar sobre algo positivo mientras lo niegas rotundamente con la cabeza. Tu mensaje es uno solo, y deberás unificar tu lenguaje verbal y no verbal en ese sentido. Para revertir este comportamiento lo recomendable es siempre orientar tu discurso verbal de forma asertiva, así, el cerebro lo interpretara como algo seguro y confiable y asentirá de forma natural con la cabeza.
El lenguaje no verbal es un tema extenso en sí mismo, pero, si evitas estos 3 gestos negativos en la medida de lo posible, notarás un cambio en la aceptación de tu público, conseguirás atrapar fácilmente su atención y tu mensaje será más claro.